Paul Vick se formó inicialmente en escultura y artes escénicas lo cual se refleja en su forma de enseñanza, en la presentación de ceremonias de sanación ancestrales y tradicionales, así como en talleres.
Desde siempre se interesó en representar la relación de las
fuerzas elementales de la naturaleza en sus exhibiciones iniciales al aire
libre tales como ambientes espaciosos que incorporan estructuras rellenas
de aire por las cuales las personas pueden pasar, y esculturas de fuego. La
intención era de animar a las personas a interactuar con las esculturas
y entre ellas. Además participó en varias compañías
experimentales de teatro como diseñador escénico y de iluminación.
A mediados de los 80 Paul trabajó como facilitador en formaciones de
crecimiento personal durante dos años antes de formarse en diversas
terapias manuales como shiatsu, reflexología y terapia craneosacral.
Desde entonces Paul ha trabajado con éxito como profesional de terapias
naturales durante más de 25 años.
En 1995 creó su propia Escuela en t. craneosacral biodinámica
y ha realizado formaciones por todo el mundo, entre otros países en
España, Reino Unido, Alemania, Suiza, EE.UU., Canadá, Nueva
Zelanda y Australia.
A finales de los ochenta y durante los noventa colaboró con diversos
maestros esotéricos y de sistemas médicos y espirituales ancestrales
. La influencia más importante fue el estudio de las enseñanzas
ancestrales tibetanas, denominadas “bon”. Durante este tiempo
Paul fue introducido a prácticas, ceremonias, rituales ancestrales
que utilizan los elementos en el proceso de la sanación.
Tocar lo Divino reúne la obra de Paul, tanto como artista y profesor/curador.
Durante el seminario Paul presentará un sistema único de curación
con un toque ligero. El seminario es un rico tapiz de trabajo de sanación,
rituales y ceremonias destinadas a abrir el corazón de los individuos,
grupos y comunidades.
“Cuando los elementos están libres para interactuar unos con
otros crean un proceso natural de cambio y renovación”. Paul
Vick
Hemos olvidado
Hemos olvidado a nuestro mejor amigo
La Fuerza de vida misma que anticipa
cada uno de nuestros movimientos,
pensamientos y deseos.
Hemos perdido el contacto.
El proceso de Resonancia Interna
crea a través de la delicadeza del toque
y de una presencia consciente,
un recuerdo.
En ese lugar de recuerdo
cerramos el círculo,
y volvemos al espíritu del ser
y a la tierra del corazón,
nuestro lugar de pertenencia.
Paul Vick